Volvieron las Fieras a disputar un partido tras el parón por las vacaciones de Semana Santa, en un encuentro que pronto desnivelaron a su
favor y que acabaron ganando de forma clara y contundente.
Fieles a su estilo de juego,
ahogaron la salida de balón del contrario y volvieron a dar un paso más en su evolución colectiva, donde la aportación de todas y cada una de las
chicas fue excepcional.
En esta ocasión al contrario del
partido que ya jugaron contra este rival, la cancha de mayores dimensiones favoreció el juego largo y rápido de nuestro equipo que realizó contragolpes verdaderamente extraordinarios.
Pero aun hubo más: conducciones de balón por la izquierda, cambios de dirección y
mano, coberturas en defensa, más acierto en el tiro exterior...
El rival poco pudo hacer ante el
juego exigente de nuestras chicas. Esa defensa intensa al 2 contra 1, que hace
que no puedas prácticamente mover el balón, es sin duda el 50% del éxito de este
equipo y el gran mérito de Jorge (coach).
Por eso se hace muy difícil jugar
contra las nuestras y por eso aquellos niños que vienen de disputar partidos más
asequibles, donde juegan con libertad e incluso pueden lucirse, acaban
completamente apagados cuando se enfrentan contra las nuestras.
¿Juego violento? En absoluto,
porque si algo no se le puede negar uno por uno a este equipo es que son tan
FIERAS como NOBLES.
A veces, los mayores nos
olvidamos que el Minibasket, NO es el baloncesto de los pequeños. El Minibasket
es una fiesta. La iniciación a un maravilloso deporte lleno de valores que
ayudarán al crecimiento de nuestros hijos.
Dejemos que disfruten mientras
sean niños, pues unas veces se gana y otras se aprende.
Jugaron: María Notario, Laia, Júlia,
Aitana, Núria, Violeta, Ariadna, Víctor y Jorge.
Bajas: María Espinosa y María Domínguez.